«Serendipity» (Señales de Amor): misión imposible
Si me siguen, y son lectores de la casa, saben que me encanta John Cusack. Es una cosa empática, no se si podría decir que es un gran actor, en letras de molde, si se que sus roles siempre han sido accesibles para todo tipo de espectadores y que algunas cosas, le salen medianamente bien.
Las comedias románticas, sobre todo. Algunos dramas y el suspenso, también. Hoy te traigo una peli que quizás, la hayas visto en el cable y no te haya llamado la atención. Repasemos: ambientación? New York (el 90% de las rom coms transcurren aquí!), química en la pareja?
No podemos determinarlo porque están poco tiempo juntos en pantalla (!), riqueza en los diálogos? Poca, y hasta un poco kirsch pero… O sea… Por qué se me ocurre hablar de “Serendipity” entonces? Justamente, porque rompe con muchos de los esquemas tradicionales en las comedias románticas. Pero para que vean el porqué, hay que saber cómo se estructura su historia:
Noche fría en la clásica ciudad del amor, Bloomingdale hasta las manos, Johnathan (Cusack) y Sarah (Kate Beckinsale) buscan guantes para hacer un regalo especial. Los dos tienen pareja y están (parece) en un buen momento de sus vidas.
Flirtean un poco (comparten un café en un lugar cuyo nombre es el título de la película) y al rato se les ocurre tentar al destino (Sarah es la creyente que quiere intentar):poner a prueba la fuerza de ese instante que lograron compartir y jugar, a ver si es cierto que no se encontraron de casualidad.
En la planta baja de un edificio que tiene varios ascensores, juegan a tentar a desafiarlo: los dos irán por ascensores diferentes sin saber cual elige el otro, si la suerte está de su lado, deberían cruzarse en el piso de destino, cualquiera que sea su elección a la hora de accionar el elevador…
Algo sucede y las cosas, arrrancan con problemas, obviamente. Los dos, quedan descorazonados, perdidos, porque lo que parecía un hecho real, no termina bien. Así es que, Johnathan y Sarah, seguirán sus vidas, un tiempo más, afectados por aquel encuentro y pensando que aún hay oportunidades de encontrar a quien podría ser su media naranja perdida en la Gran Manzana…
Pero internamente, los dos no han podido superar el encuentro. Y más adelante, deberán enfrentarse a difíciles decisiones personales, que pueden marcarlos de por vida. Seguir esperando que el milagro se materialice o dar un paso hacia la concreción de una pareja formal, desde lo real?
El reloj se moverá y los pondrá a prueba en horas cruciales donde tendrán que decidir, a ciegas, sobre su futuro, sin poder anticipar el final… Cusack la rompe. Su personaje está a la deriva todo el tiempo, es instinto puro. Es un sujeto con el que todos nos identificamos, y Beckinsale nos regala su mejor actuación en mucho tiempo, no es sólo (al menos esta vez) una cara bonita.
Los dos se sacan chispas sin relacionarse (compartir tiempo en pantalla), lo cual le da a “Serependity” una fuerza extraña. Aquí no habrá un camino de construcción de pareja, juntos. Para nada! Es la supervivencia pura. Pero a pesar de plantearse como un recorrido distinto, la película paga. Su director, Peter Shelton (el mismo de la remake Shall we dance?”), dirige con solvencia y va caracterizando las vidas de sus protagonistas con mucha precisión.
La confusión y las estrategias que ambos usan para demorar sus respectivas decisiones, son muy divertidas. Sin embargo, hay una conexión con el espectador que va más allá: esta película apela a las representaciones inconcientes universales de que hay un otro siempre, que nos espera en algún lugar del mundo y que llegará, cuando sea el momento.
Esta poderosa imagen inconciente es la que el guión utiliza para llevar adelante la historia y la verdad, lo hace bien. Con el estilo de las comedias románticas deterministas, “Serependity” te lleva a destino y es una de las cintas de género que más me originales me parecieron en este tiempo. No descolla, pero es una bocanada de aire fresco, a la hora de buscar un producto original en un género muy trillado…
Algo más: el lugar donde se inicia la historia, es un lugar que existe (Serependity!) y ofrece exactamente el helado granizado de chocolate caliente que ellos toman juntos, así que si están por NYC, pueden pasar a probarlo! (la mesa donde se filmó esa toma se llama «The Star Table», ahora y es la estrella del lugar).